Mateo-118-24El anuncio de una señal salvadora de Dios al pueblo no lo presenta Isaías como una manifestación de fuerza superior frente a tantos poderes establecidos que buscaban dominar con sus ejércitos bien organizados. Ese era el camino ordinario, común, el camino conocido hasta entonces. En distintos momentos se llama a Dios, en el Antiguo Testamento, el Señor de los Ejércitos. El profeta Isaías quiebra esa imagen de Dios.

El Hijo no llegará hasta nosotros como un poder que intimida y encoge el corazón, provocando una sumisión paralizante de miedo y de silencio. La salvación de Dios llegará a Israel y crecerá en medios de todos en una relación de proximidad humana de máxima cercanía, en la vulnerabilidad de un niño que nace de una joven y crece confiado entre las relaciones de los vecinos. El Hijo de Dios encarnado nos hace presente a Dios mismo. El niño que va a nacer será el Emmanuel, que significa “Dios con nosotros”.

Nacerá el Hijo de Dios en Belén, en las afueras excluidas de la ciudad, en la pobreza, y crecerá en los procesos lentos de la vida, sin entrar en el ritmo de nuestras impaciencias ni de nuestras expectativas, en el escondimiento, “haciéndose uno de tantos” (Fil. 2,7). No hay un clic electrónico que acelere su crecimiento y adelante los tiempos de Dios. No surgirá con una figura deslumbrante que ofusque la mirada y seduzca el corazón.

Desde esa presencia de Dios entre nosotros, en Jesús de Nazaret, todo será posible. No hay situación humana tan deteriorada, tan dominada por fuerzas hostiles contra la vida, que se pueda desalojar a Dios de ese fondo último donde Él se ha situado para siempre, donde Dios encarnado actúa en favor de la vida plena que crece entre nosotros. Contemplar la Navidad es entrar en este misterio de vida. Dios con nosotros nos revela que necesitamos entrar en la manera como Dios nos salva, nos llena de dignidad y de capacidad de crear el futuro más humano junto a Él.

María fue la primera en acoger este misterio, en el que se adentrará durante toda la vida. Aprendió a vivir en la mirada de Dios, en la que se hace consistente su proyecto. José también es iniciado por Dios y asume ese embarazo misterioso de María. En el amor comprometido, fuerte y tierno de esa joven pareja, el Hijo encarnado va siendo “Dios con nosotros”.

 

Ora con la Palabra

 

Domingo 29 de enero: IV del Tiempo Ordinario

 

Mt 5,1-12ª

“Dichosos los pobres en el espíritu”

Lunes:  Heb 11,32-40/ Sal 31(30)/ Mc 5,1-20

“Espíritu inmundo, sal de este hombre”

Martes:  Heb 12,1-4/ Sal 20(21)/ Mc 5,21-43

“Contigo hablo, niña, levántate”

Miércoles: Heb 12,4-7.11-15/ Sal 103(102)/ Mc 6,1-6

“No desprecian a un profeta más que en su tierra”

Jueves: Presentación del Señor 
Mal 3,1-4 / Sal 24(23)/ Heb 2,14-18/ Lc 2,22-40

“Mis ojos han visto a tu Salvador”

Viernes:   Heb 13,1-8/ Sal 27(26)/ Mc 6,14-29

“Es Juan, a quien yo decapité, que ha resucitado”

Sábado:   Heb 13,15-17.20-21/ Sal 23(22)/ Mc 6,30-34

“Andaban como ovejas sin pastor”


Logo Red Mundial de Oración del Papa           
               Intención para Febrero 2023

El Papa nos pide orar por las parroquias, para que, poniendo la comunión en el centro, sean cada vez más comunidades de fe, fraternidad y acogida a los más necesitados.

Suscripción al boletín

Si desea recibir la publicación en formato digital, solicítelo a la dirección: vidacristianaencuba@gmail.com.